domingo, 23 de febrero de 2020

RESUMEN DE MONTES MORA, JAUME. ¿CÓMO SER ANTICAPITALISTA EN EL SIGLO XXI? UNA NUEVA PERSPECTIVA RADICAL DE LA MANO DE ERIK OLIN WRIGHT.


UNIVERSIDAD BOLIVARIANA DE VENEZUELA
VICERRECTORADO ACADÉMICO
DIRECCIÓN GENERAL DE PRODUCCIÓN Y RECREACIÓN DE SABERES
COORDINACIÓN REGIONAL DE PRODUCCIÓN Y RECREACIÓN DE SABERES
EJE GEOPOLÍTICO REGIONAL “GENERAL CIPRIANO CASTRO”


 RESUMEN DEL CAPÍTULO 5. APORTES PARA UNA TEORÍA ANTICAPITALISTA DE DERECHOS HUMANOS


RESUMEN DE MONTES MORA, JAUME. ¿CÓMO SER ANTICAPITALISTA EN EL SIGLO XXI? UNA NUEVA PERSPECTIVA RADICAL DE LA MANO DE ERIK OLIN WRIGHT.




PARTICIPANTE:
William Augusto Ambrosetti Rincón
C.I.  Nro. 9229916

UNIDAD CURRICULAR:
   Construcción Social de los Derechos Humanos
Maestría en Derechos Humanos



San Cristóbal, febrero 2020


RESUMEN DEL CAPÍTULO 5
APORTES PARA UNA TEORÍA ANTICAPITALISTA DE DERECHOS HUMANOS
     Los derechos humanos son reivindicaciones específicas que contribuyen o no a la satisfacción de las condiciones de la humanidad, ante relaciones de dominio, explotación y exclusión existentes en la sociedad por causas de modelos de civilización, relaciones sociales de producción, sistemas socioculturales, formas de organización política que establecen una determinada configuración que hace imposible la vida digna de las personas, incluida la naturaleza.
     De esta manera, es necesario analizar los derechos humanos en el marco del capitalismo como forma de organización social hegemónica, red global de poder, en la cual se reconoce la acumulación ilimitada de capital a partir de una clara asimetría de poder en las relaciones entre quienes detentan los medios de producción y quienes han de subordinarse a ellos, dado que solo pueden ofrecer su fuerza de trabajo a cambio de una remuneración salarial, establece Ramos Filho y Marques da Fonseca, citado por Gándara (2019). Es decir, una red global de poder que integra procesos tanto económicos como políticos y culturales, indica Castro Gómez y Grosfoguel, citado por Gándara (2019).
     La economía, por tanto, debe reconocerse en su capacidad para producir una determinada forma de ser humano (como sujeto productivo) y un tipo específico de orden social, plantea Escobar citado por Gándara (2019), basado en las exigencias del mercado propias del actual proceso de globalización capitalista del sistema neoliberal. Herrera Flores citado por Gándara (2019) indica que esta fase de la economía neoliberal globalizada se caracteriza, básicamente, por tres fenómenos. En primer lugar, por la ampliación constante de las fronteras de la acumulación capitalista (el trabajo productivo, el ocio, los conocimientos tradicionales). En segundo lugar, por la contaminación e impregnación de lo humano de las exigencias morales de dicha acumulación: competitividad, consumismo, egoísmo “racional”, individualismo, etc. Y, en tercer lugar, por la imposición de todos estos fenómenos en todas las escalas en que la vida y la productividad humanas se despliegan como si fueran procesos “naturales” e irreversibles. El mercado se transforma de esta manera en la mayor amenaza a la sostenibilidad de la vida. Las sociedades de mercado en este caso, están conformadas por sujetos aislados, que se perciben entre sí como competidores que deben orientarse por el logro del máximo beneficio personal.
     En el marco de este sistema societal, acontece el régimen civilizacional que Boaventura de Sousa Santos citado por Gándara (2019) ha definido como fascismo social, caracterizado por diversas formas de marginación (apartheid social, fascismo de la inseguridad, fascismo paraestatal, fascismo financiero…) de extensas masas de población que quedan excluidas de toda forma de contrato social: jóvenes de guetos urbanos populares, campesinos, trabajadores del posfordismo, etcétera.
     Ante este panorama, los desafíos teóricos y prácticos establecen que se necesita desnaturalizar las supuestas evidencias que el capitalismo ha logrado instalar como forma de pensamiento e imaginar alternativas concretas que permitan anudar el lazo social sobre la base de otro metabolismo que no sea el del capital.
1. NECESIDAD DE UNA APROXIMACIÓN TEÓRICA CAPAZ DE RECUPERAR LA ECONOMÍA POLÍTICA
     Reconocer que la lucha de los derechos humanos va más allá de su mero reconocimiento formal en los marcos normativos, atendiendo a la construcción de reales condiciones de vida digna en los diversos contextos en que las personas y los pueblos realizan sus proyectos vitales, exige recuperar el análisis crítico de la economía política en la comprensión de los derechos.  En este sentido, una economía política determinada puede privilegiar la reproducción del capital, otra la de la fuerza de trabajo y una tercera la del ser humano. La matriz óptima para imaginar, pensar y luchar por los derechos humanos es la que afirma la reproducción de la vida humana y de la Naturaleza, plantea Gallardo citado por Gándara (2019).
     El discernimiento crítico de los modelos económicos permite desnaturalizar supuestas posiciones “necesarias e ineludibles” en las formas de asignar los recursos en las sociedades. Cualquier propuesta de política económica y de economía política debe conocer de la centralidad de las necesidades humanas y de las formas de organización social posible para atenderlas, con el fin de no establecer ni reforzar dinámicas discriminatorias, autoritarias, totalitarias y de exterminio de lo humano y la naturaleza, plantea Gallardo citado por Gándara (2019). En función de ello, surge la contradicción entre los procesos de acumulación irrestricta de capital, base de la propuesta capitalista, y la asunción de derechos humanos entendidos desde el pensamiento crítico, porque buena parte de los marcos normativos son definidos en función de la dinámica de acumulación del capital, establece Senent de Frutos citado por Gándara (2019).
     Ante esta situación, necesitamos se requiere reconocer el papel del discurso de los derechos e identificar las potencialidades que recojan y animen otras prácticas. Un orden social sostenido sobre la base de la acumulación de capital, que legitima, por tanto, relaciones asimétricas en el acceso a la propiedad, en el manejo de la información, en la construcción de conocimiento y en el control de las condiciones necesarias para vivir dignamente, debe, con justa razón, calificarse como estructuralmente contrario a derechos humanos, plantea Gallardo citado por Gándara (2019).
2. CRITERIOS Y PRINCIPIOS ORIENTADORES
     Se requieren construcciones teóricas que integren en su discurso la gestación de condiciones que hagan posible transformar los impedimentos sociohistóricos que en cada caso concreto las personas y los pueblos requieren enfrentar para así poder acceder a las diferenciadas formas de vida digna. Se trata de una construcción que, sin pretender establecer de antemano cuáles han de ser esas condiciones y las capacidades necesarias para enfrentarlas, permita reconocer y animar alternativas frente a los múltiples mecanismos y estructuras de subordinación que la dinámica sociopolítica plantea, fundadas en las asimetrías de poder.
     En ese sentido, se considera el Criterio de Riqueza Humana formulado por Herrera Flores citado por Gándara (2019), como parte de su teoría de derechos humanos. Dicho criterio plantea la necesidad de que el ser humano esté en condiciones de reaccionar frente al entorno de relaciones en que vive. Así, el elemento paradigmático de los derechos humanos lo conformaría “la facultad para gozar del desarrollo de las capacidades humanas objetivadas social e institucionalmente” plantea Herrera Flores citado por Gándara (2019). Restablece el circuito de reacción cultural frente a aquellos contextos sociohistóricos que niegan el acceso a los bienes, tanto material e inmaterial, necesarios para la vida humana. El Criterio de Riqueza Humana ofrece un postulado concreto de acción.
     A partir de este criterio, Herrera Flores citado por Gándara (2019) plantea la lucha por los derechos humanos como lucha por la creación de condiciones para que cada actor social pueda definir y desarrollar su proyecto personal y colectivo de vida humana. Lo único que debe ser universalizado es el empoderamiento de los sujetos para que puedan reaccionar frente a su entorno de relaciones y construir así sus diferenciados proyectos de vida digna de manera diferenciada en cada contexto cultural, ético, social y político.
     En el mismo horizonte al que apunta el Criterio de Riqueza Humana formulado de Herrera Flores, Helio Gallardo plantea el Principio de Agencia Humana como parte de su pensamiento crítico en derechos humanos, entendiendo por ella la capacidad humana de producir realidad y dotar de carácter el quehacer en entornos no totalmente controlables. Para Helio Gallardo citado por Gándara (2019): “Derechos humanos tienen como referente básico la vocación de autonomía de los sujetos sociales como matriz de autonomía de los individuos o personas”.
     Ambas propuestas establecen que todo ser humano, en virtud de su propia diferencia, debe tener la capacidad de reaccionar frente a su entorno, dotando de sentido a su propia realidad. El objetivo que persigue, en síntesis, de David Sánchez Rubio citado por Gándara (2019) es que:
La totalidad de los grupos sociales intervenga tanto en la producción material y de significado como en la distribución y disfrute de los bienes sociales. No solo el objetivo es que todos obtengan comida, salud y techo, sino también que todos ayuden a decidir, desarrollar y controlar, activa y directamente, las diferentes instancias encargadas de organizar el acceso, la producción y la distribución de estos y de los demás bienes; los imaginarios y mitos sobre los que se articulan los proyectos de vida; las jerarquías en las formas de satisfacer las necesidades; etc. (p. 214).
     En este caso, es el proceso en que los seres humanos, desarrollando las capacidades necesarias para ello, se van constituyendo en autores de su propia historia; busca entonces “que la humanidad entera, como sujeto último de la historia, pueda llegar a ser la creadora y la dueña de su propio curso histórico, de la vida histórica entera, plantea Ellacuría, citado por Gándara (2019). Liberación que intenta hacer concreto el ejercicio de su libertad en las condiciones materiales e históricas que le son propias, al plantear: liberación de las necesidades básicas (“liberación de la opresión material”), liberación de las ideologías y de las instituciones jurídico-políticas deshumanizantes (“libertad ante la represión”), liberación personal y colectiva de todo tipo de dependencia que impide una autodeterminación plena, la liberación de sí mismo (frente a cualquier decantación idolátrica de un egocentrismo destructor, es necesario encontrarse con el otro). Una importante referencia desde el contexto latinoamericano, son las propuestas del sumak kawsay (buen vivir), a través del cual se expresa la lucha de “personas que desean ‘poder hacer su vida’, sin dejarlas a merced de factores que les son ajenos y hostiles”, plantea Gudynas y Acosta, citados por Gándara (2019).
     El Criterio de Riqueza Humana ofrece un basamento sólido sobre el que es posible formular un discurso de derechos humanos que responda a los desafíos que el actual orden social capitalista y su modelo civilizatorio presenta. Los aportes de Franz Hinkelammert, citado por Gándara (2019) postulan la necesidad de una racionalidad reproductiva, centrada en la producción, reproducción y desarrollo de las condiciones necesarias para la vida. Según este autor, se requiere un equilibrio que permita que el ámbito de esta razón instrumental, no afecte o impida el circuito natural de la vida humana, y el que todos los seres humanos se puedan integrar en él. Hacer posible esta incorporación del ser humano en el circuito natural de la vida, asegurando las condiciones de su producción y reproducción, sería el fundamento de los derechos humanos. Concepción de derechos humanos ofrecida por Herrera Flores citado por Gándara (2019), que identifica como “medios discursivos, expresivos y normativos que pugnan por reinsertar a los seres humanos en el circuito de reproducción y mantenimiento de la vida, permitiendo abrir espacios de interpelación, de lucha y reivindicación”.
     Hinkelammert citado por Gándara (2019) al hablar de derechos humanos como construcción de condiciones que aseguren la producción y reproducción de la vida, más allá de la mera sobrevivencia y continuidad biológica, indica:
Son los derechos de la vida humana en toda su amplitud [...]. No se trata simplemente de la integración en el circuito de la vida, de la cual depende todo ser corporal vivo. Se trata específicamente del circuito natural de la vida humana, que, por supuesto, presupone la naturaleza externa al ser humano. La conservación de esta naturaleza es una extensión necesaria de la vida humana y como tal extensión, jerarquizada por la vida humana, la propia naturaleza tiene un derecho a la vida también […]. Esta integración en el circuito natural de la vida humana es específicamente humana. Se trata de comer humanamente, vestirse humanamente, educarse humanamente. Por eso, toda integración en el circuito natural de la vida humana es a la vez cultural. Por eso presupone libertad. Implica por tanto libertades, que no se derivan del circuito natural de todos los seres vivos directamente (p. 463).
     Al considerar los derechos humanos desde esta recuperación de la economía política, permite comprenderlos desde las luchas sociales en el marco de sociedades con relaciones socioeconómicas asimétricas y conflictivas, con lo cual se logra dar cuenta de la relacionalidad propia del ser humano como ser social, indica Gallardo, citado por Gándara (2019). En esa línea argumentativa, esta forma de comprender los derechos humanos impulsa a crear condiciones que permitan frenar el automatismo del mercado irracionalmente absolutizado; un mercado que se reproduce a sí mismo sin otro criterio que la máxima eficiencia económica; lo que es contrario a la creación de condiciones que permitan una vida digna para todos y todas. Pero hacer frente a este desafío e impulsar las transformaciones necesarias, exige controlar los distintos poderes, tanto públicos como privados que ponen en riesgo a los derechos humanos.
     Franz Hinkelammert citado por Gándara (2019) plantea que los derechos humanos centrados en la propiedad privada se tornan imposibles de control, en vista que las burocracias privadas afirman su poder en nombre de los derechos humanos. En este caso, no es posible hablar de derechos humanos sin asumir la necesaria intervención sistemática en los mercados en función de asegurar las condiciones necesarias para vivir con dignidad.
3. REPENSAR EL ESTADO PARA PODER CONTROLAR LOS PODERES FÁCTICOS PRIVADOS
     El papel del Estado y su rol en los procesos de transformación social es necesario para que se haga efectivo el disfrute de los derechos humanos. La globalización neoliberal en el intento por hacer desaparecer el Estado, lo que en realidad pretende es transformarlo en función de sus intereses. En lugar de desregulación lo que está aconteciendo es una re-regulación que tiene como eje las reglas que el capitalismo requiere para intensificar su acción.
     El papel del Estado es fundamental para controlar a la población y para poner lo público al servicio de los intereses privados, plantea Hinkelammert, citado por Gándara (2019). De tal manera que, en lugar de una crisis del Estado, lo que se enfrenta es la transformación del modelo de Estado para ajustarlo a las demandas del capital globalizado. Sin embargo, el Estado, dependiendo de cómo se configure, puede ser de gran significación en la construcción de alternativas contra-hegemónicas. La configuración del Estado responde fundamentalmente a los intereses de los sectores sociales con mayor poder; sin embargo, no se debe obviar que su configuración también es producto de luchas llevadas adelante por diversos sujetos populares que intentaron superar situaciones de subordinación y exclusión. No se puede cometer la injusticia de invisibilizar los logros de las luchas populares, a lo largo de la historia.
     Se requiere complejizar la valoración que tradicionalmente se ha tenido sobre el Estado, al entenderlo como mera herramienta de dominación de una clase sobre otra, o bien considerarlo irrelevante o puro factor de corrupción que debe ser dejado de lado por los actores que buscan la emancipación social, como lo plantea De Sousa Santos, citado por Gándara (2019). Frente a tales posturas, se debe asumir el Estado como un campo de contradicciones sociales, que puedan ser aprovechadas por los movimientos populares, combinando, en la medida en que las circunstancias específicas lo permitan, “la lucha legal y la ilegal, la lucha institucional y la directa, la lucha dentro del Estado y la lucha fuera de éste”, plantea De Sousa Santos, citado por Gándara (2019). Proceso de un discernimiento permanente de acciones a partir del criterio del protagonismo y empoderamiento de los sectores sociales vulnerabilizados. Cambio en el tránsito del Estado burgués al Estado Democrático y Social, que discurre desde la formalidad de la declaración de los derechos a la esencialidad de su realización. Estado consolidado, con la fuerza necesaria para asumir y llevar adelante los proyectos presentados desde los movimientos sociales. Estado vigoroso capaz de intervenir y controlar al mercado.  Estado identificado y potenciado en su capacidad de control sobre las burocracias privadas.
     En general, es necesaria una posición responsable, capaz de responder por las consecuencias de la decisión a tomar. La lucha dependerá de cada contexto, del discernimiento que los propios actores realicen en su situación específica. Entendiendo los derechos humanos como una construcción sociohistórica, su posible reformulación ha de estar sometida a la dinámica que definan los actores sociales y las relaciones (de consenso, conflicto, construcción de hegemonía, etcétera) que entre ellos se constituyan. El discurso de los derechos humanos (la manera de comprenderlos, de narrarlos, de aplicarlos, de institucionalizarlos, etcétera) es, al fin y al cabo, un espacio de disputa. 
     Cuando se plantea que el Estado tiene obligaciones en materia de derechos humanos, se responde a una construcción social que puede ser reformulada. La pregunta, entonces, es: ¿qué forma de comprender y de aplicar los derechos resulta más provechosa de cara a lograr mejores condiciones de justicia, de vida digna? Al Estado le corresponden las obligaciones de respetar, defender, proteger, garantizar y promover los derechos, en los términos conocidos. Convendría afianzar y desarrollar herramientas legales, tanto en el plano nacional como en el internacional, y avanzar en el servicio que el Estado debe prestar supervisando, controlando y sancionando las acciones por parte de las empresas que afecten la calidad de vida de la gente; pero, al mismo tiempo, pensar en construir y desarrollar otras herramientas conceptuales, jurídicas, políticas, que permitan actuar en los escenarios que la globalización ha ido definiendo.
     Se trata de construir y consolidar nuevas formas de control democrático que permitan atender a las asimetrías creadas y susceptibles de ser transformadas, sometiendo así a actores hasta ahora no considerados por la doctrina dominante sobre los derechos. Evidentemente, esta construcción implicará un gran esfuerzo creativo, no exento de riesgos, y una gran osadía política para definir los mecanismos, instrumentos y sistemas de protección necesarios que más favorezcan a la construcción de vida digna para todos y todas, pero empezando por quienes se encuentran en condiciones más precarias para construir sus proyectos de vida: personas y colectivos sometidas a relaciones de explotación, exclusión, subalternización estructural.


RESUMEN
Montes Mora, Jaume. ¿Cómo ser anticapitalista en el siglo XXI? Una nueva perspectiva radical de la mano de Erik Olin Wright.
     La realidad que enmarca la sociedad actual establece, en líneas generales que como plantea Montes Mora, Jaume: “el sello distintivo del capitalismo es pobreza en medio de abundancia”. Es innegable que grandes naciones capitalistas se describen porque en ellas ha habido un alto crecimiento económico, mejoras tecnológicas e índices más altos de productividad, pero también es verdad que ese mismo sistema capitalista agrava las desigualdades, destruye el planeta y solo ofrece trabajos precarios para una gran mayoría social enajenada.
    De esta manera, lo necesario es lograr un mundo que mejore las condiciones de vida de la gente. El término “capitalismo” en palabras de Wright, citado por Montes Mora, Jaume, lo define como una economía de mercado en tanto que se trata de una dimensión en la que se coordinan una serie de intercambios voluntarios, ofertas, demandas y precios, combinada con una determinada estructura social en la que hay, como mínimo, dos clases enfrentadas. Los propietarios del capital que ejercen su poder a través de las empresas y el sistema económico, en un proletariado descontento que, a través de una ideología clara y rupturista, analiza las causas y las posibles soluciones a dicho sistema socioeconómico, a través de la lucha sindical o la resistencia individual.
     En este caso, una teoría anticapitalista de los derechos humanos debe ser vista desde una perspectiva anticapitalista para el siglo XXI, basada en intereses materiales de clase y fundamentada en valores morales, que permitan la inclinación hacia el apoyo de iniciativas anticapitalistas y la construcción en torno a valores morales de acciones motivadas por preocupaciones morales y no solamente por intereses económicos, incluso entre aquellos que tienen bien definida su posición social.
     La claridad de estos valores que se proponen es esencial para pensar en la conveniencia de las diferentes alternativas, porque no se trata solamente de analizar lo que está mal, sino también de plantear lo que es deseable. Wright citado por Montes Mora, Jaume, propone tres grupos de valores que deben ser centrales en la crítica moral del sistema capitalista: igualdad/justicia, democracia/libertad y comunidad/solidaridad.
     En primer lugar, en cuanto a la idea de igualdad/justicia, el sociólogo americano propone que “en una sociedad justa, todas las personas deberían tener igual acceso a los medios sociales y necesarios para vivir una vida próspera”, porque el capitalismo genera inherentemente un acceso desigual a las condiciones materiales necesarias para vivirla, consecuencia de: (1) la relación capital-trabajo, es decir, la existencia de mayor demanda que de oferta de trabajo, agravada por la globalización y que genera explotación; (2) los elementos de competitividad y riesgo intrínsecos al mercado capitalista, o sea, la división entre ganadores y perdedores; y, finalmente, (3) el crecimiento económico desmedido y la revolución tecnológica, que provocan la destrucción de puestos de trabajo pero, contrariamente al devenir histórico, no están fomentando la creación de nuevos.
     En segundo lugar: democracia/libertad, se hace referencia que en una sociedad plenamente democrática, todas las personas deberían tener igual acceso a los medios necesarios para participar en decisiones sobre cuestiones que afectan a sus vidas, pero el capitalismo, en cambio, actúa en contra de estos valores, porque muchas veces no hay control democrático sobre decisiones que afectan a un gran número de personas, existen presiones sobre la autoridad pública por parte de los capitalistas, la gente con recursos tiene mayor acceso al poder político que la gente que tiene menos, las empresas capitalistas están organizadas como dictaduras, la desigualdad material provoca desigualdades, etc.
     Finalmente, la comunidad/solidaridad como deber ser. Este tercer valor moral fundamental en la lucha anticapitalista expresa el principio según el cual las personas deberían cooperar unas con otras no solo porque se benefician personalmente, sino por el compromiso con los demás y el sentimiento de que es lo que se debe hacer”. El sistema socioeconómico actual actúa en completa oposición a dicha idea, porque fomenta la avaricia y el miedo, el individualismo competitivo y el consumismo privatizado.
     La superación por tanto del capitalismo, parte del hecho que el sistema socioeconómico, una vez analizadas las injusticias que provoca, debe ser erradicado y sustituido por uno nuevo en el que los ideales de justicia, democracia y solidaridad estén plenamente satisfechos. La resistencia a este sistema imperante ha sido liderada, eminentemente, por la sociedad civil, de modo que está estrechamente vinculada a los valores de comunidad y solidaridad. Además, suele estar impulsada por identidades que van más allá de la de clase social, como la etnia, la religión, el género, la orientación sexual, por lo que, poner en práctica modos de actuación basados en los valores de igualdad, democracia y solidaridad, como la producción y la distribución de bienes y servicios por parte del Estado, cooperativas dirigidas por los propios trabajadores, la economía del bien común, redes colaborativas, software libre, entre otras, pueden ser directamente anticapitalistas o, sencillamente, no capitalistas.
     En este caso, la superación hacia un sistema un poco más justo y democrático solo pasará por un proceso gradual transcendente en el tiempo, que busque, desee y necesite un cambio. Un cambio que debe fundamentarse en valores igualitarios, democráticos y solidarios. Es luchar por algo que permita superar un sistema intrínsecamente injusto y establecer una relación de compromiso sobre lo que es bueno para todos, a través de poner en el centro de la sociedad las diferencias individuales, tomando como base la constitución de todos los humanos: La Declaración Universal de los Derechos Humanos.

  
BIBLIOGRAFÍA
Gándara Carballido, Manuel (2019).  Los Derechos Humanos en el siglo XXI. Una mirada desde el pensamiento crítico. Instituto Joaquín Herrera Flores. 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires: CLACSO, Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, 2019. Librería Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales Conocimiento Abierto, Conocimiento Libre. http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/se/20190830102123/Derechos_Humanos_sigloXXI.pdf
Montes Mora, Jaume. ¿Cómo ser anticapitalista en el siglo XXI? Una nueva perspectiva radical de la mano de Erik Olin Wright. https://latrivial.org/como-ser-anticapitalista-en-el-siglo-xxi-una-nueva-perspectiva-radical-de-la-mano-de-erik-olin-wright/





viernes, 21 de febrero de 2020

Entrevista a Mireya Vivas de Movimientos Sociales de Alimentación del Municipio Ayacucho CLAP(*) “Ríos Reina” del Estado Táchira


                      REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN
UNIVERSITARIA,
UNIVERSIDAD BOLIVARIANA DE VENEZUELA
EJE GEOPOLÍTICO REGIONAL “CIPRIANO CASTRO”
COORDINACIÓN DE PRODUCCIÓN Y RECREACIÓN DE SABERES
PFA: “DERECHOS HUMANOS” 
MAESTRANTE: AGUSTÍN SANTOS MEDINA MORENO.

agustinsmm53@gmail.com


                                              
GUIÓN DE ENTREVISTA:
Instrumento dirigido a movimientos sociales de alimentación del Municipio Ayacucho  CLAP(*) “Ríos Reina” del Estado Táchira
(*) Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP)
Identificación de la Institución
Municipio Ayacucho  CLAP “Ríos Reina” del Estado Táchira
Nombre del entrevistado
Mireya Vivas
N° de teléfono
0416-8709804
Correo electrónico
Mireyavivas13@gmail.com
Cargo del entrevistado
Jefa de Calle
Fecha de la aplicación
Jueves 30 de Enero de 2020
El presente guión de  entrevista  semiestructurada, ha  sido  diseñado para obtener; Información   sobre  Derechos Humanos y Movimientos Sociales. La relación entre el Desarrollo de los DDHH y la Dinámica Conflictiva de los Movimientos sociales. La búsqueda de información pretende estar inmersa en el análisis de la vinculación dialéctica entre el desarrollo de los derechos humanos y la dinámica conflictiva de los movimientos sociales tanto como realidad global como particular/considerando además la territorialidad. En el marco de la propuesta Titulada: El acceso a la alimentación como derecho humano expreso en la “Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”, caso Municipio Ayacucho, CLAP “Ríos Reina” La   información fundará  un  valioso aporte. Los resultados que se obtengan permitirán  el  desarrollo en la Maestría de DDHH  de la unidad curricular Construcción Social de los Derechos Humanos en la UBV a cargo del Profesor Franklin Zambrano y se divulgará en el blog cuya dirección electrónica es accesible en la web: https://ddhhparahumanos.blogspot.com/ Por tanto, la información serán de uso público, para fines académicos.
 
Factores

Ítems de la Entrevista
La Construcción Social
Naturaleza multidimensional. Dinámica conflictiva de los movimientos sociales
1. En el Contexto histórico. La construcción de lo que hoy es el CLAP. ¿Cuál ha sido el evento de mayor impacto en el CLAP “Ríos Reina” que se relacione con los DDHH? Respuesta: La situación actual de crisis, el bloqueo económico y la necesidad de organizarnos para poder adquirir los alimentos de la cesta básica. Para nadie es un secreto el contexto integral de guerra económica, psicológica y financiera, signada por el férreo ataque desinformador de los medios de comunicación al servicio de los intereses imperiales.

2. En el Contexto histórico. La construcción de lo que hoy es el CLAP. ¿Cuál ha sido el evento de mayor impacto en el CLAP “Ríos Reina” ¿La motivación de los vecinos de la comunidad, se encuentra en relación a la satisfacción  de necesidades personales básicas o más bien como un derecho humano consagrado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.? Respuesta: El hecho consagrado en la Constitución que es un hecho participativo y protagónico, además del derecho fundamental como lo es el derecho a la alimentación del pueblo venezolano y de quienes de manera circunstancial o permanente, habitan nuestros territorios, indistintamente de su origen o nacionalidad.

3. En el contexto dialectico del estado y las políticas sociales emanadas desde éste a través del gobierno revolucionario. ¿Considera usted que el CLAP “Ríos Reina” es un movimiento social y que se respetan los DDHH? Respuesta: Si se respetan los derechos humanos hasta donde los miembros de la comunidad se quieran integrar, ya que se parte de los principios de la moral, la ética y las buenas costumbres. Aplica el decir: Allí, donde uno somete a los demás, o donde los demás someten a uno no hay libertad.

Vinculación dialéctica entre el desarrollo de los derechos humanos y la dinámica conflictiva de los movimientos sociales tanto como realidad global

1. ¿Qué aspecto relevante cree usted que debe sobresalir respecto a las políticas públicas del estado venezolano y su relación con los DDHH? Respuesta: Las políticas públicas han emanado vicios políticos y sociales tendientes a constituirse en cultura, sobre todo en los estados fronterizos, en el que los productos subsidiados por los programas de alimentación han sido el objeto de mafias de contrabando de extracción desde el primer momento. Inicialmente hacia territorio colombiano y ahora en el contexto de la guerra económica, se ha masificado la extracción y acaparamiento de productos de primera necesidad, con énfasis en alimentos.

2. ¿Qué característica fundamental en los CLAP denota la descripción de la corresponsabilidad del pueblo, en el principio constitucional de la democracia participativa y protagónica. Siendo el mismo sujeto de derecho, garante de derecho? Respuesta: El caso del derecho a la alimentación, ha sido históricamente uno de los aspectos más enfáticos de las políticas públicas de los gobiernos de la quinta República (Hugo Chávez y Nicolás Maduro); llevado a cabo por distintos programas en los que se ha destinado un gran porcentaje de los recursos destinados a la inversión social.

3. Existe en el país respecto a los CLAP el fenómeno de la burocratización. De hecho ¿Cómo se relaciona la burocratización con los DDHH? Respuesta: Es recurrente el fenómeno de la burocratización. En este contexto, existen dificultades en el cumplimiento de las garantías y derechos fundamentales consagrados en la constitución en el marco del estado social de derecho y de justicia.

Vinculación dialéctica entre el desarrollo de los derechos humanos y la dinámica conflictiva de los movimientos sociales tanto como realidad Particular

1. De lo global a lo particular. Hay casos de corrupción respecto a los CLAP., procesados por la defensoría del Pueblo 2017-2018 íntimamente relacionado con los DDHH ¿Creé usted que la cartelización de dichos programas en función de intereses particulares de grupos con filiación política o delictiva, muchas veces es, emanada de la misma estructura del estado? Respuesta: Por ejemplo la entrega de los juguetes y del pernil en Diciembre son ejemplos claros de corrupción emanada de la misma estructura del estado. Sin embrago, el deber es denunciar.

2. En la Gran Misión Abastecimiento Soberano (GMAS) Táchira, respecto a los CLAP, se tiene estadísticas de atención a la población tachirense. ¿Dónde se refleja estos datos? Respuesta: Se supone pero son de difícil acceso

3. Julio 2019 Según César Fonseca, funcionario de enlace de la GMAS ¿Que opinión respecto a Derechos Humanos le sugiere el Programa de Ferias del Campo Soberano que beneficiaron a más de 2.300 familias en 4 comunidades de San Cristóbal? Respuesta: Se escucha de éstos programas en San Cristóbal pero son de difícil acceso para Colon

4. ¿Qué opinión puede aportar usted, respecto a la incorporación de la Milicia en la entrega de los productos? Respuesta: Se supone que sea para mayor control aunque quizá la respuesta sea más burocratismo. Eso debería ser con el carnet de la Patria que cada quien reciba el beneficio en Centros como el GMAS en San Cristóbal, se lleve el Control Centralizado. Los milicianos que garanticen que a todos les llegue por igual los productos de la cesta básica y que apoyen en el resguardo y control del CLAP





Vinculación dialéctica entre el desarrollo de los derechos humanos y la dinámica conflictiva de los movimientos sociales tanto como realidad en función de la Territorialidad









1. Agosto 2019 Según Prensa regional Cuatro fallas de borde y una gran cantidad de baches caracterizan la carretera que une la jurisdicción de Michelena con San Juan de Colón. Respecto a Los problemas de la vialidad de la zona norte del Táchira y los DDHH ¿Cree usted que imposibilitan la buena gestión del Programa CLAP “Ríos Reina”? Respuesta: Obviamente la vialidad como en todos los procesos de distribución retarda los procedimientos y por tanto llega tarde el beneficio a las comunidades.

2. ¿Qué aportes puede dar el CLAP “Ríos Reina” respecto a DDHH y a Identificar las características de los fenómenos que vulneran el derecho a la alimentación en la distribución de los insumos correspondientes a los comités locales de abastecimiento y producción como hecho material de las políticas públicas de protección del estado venezolano a través de estas organizaciones de base del poder popular, en la comunidad de “Ríos Reina”. Respuesta: La distribución más periódica de los beneficios del programa porque en Caracas se trabaja con Caja de alimentos y caja de productos de Higiene y aquí eso no se ve. Adicional, que se haga seguimiento y Control de los productos que debe llevar la Caja o Bolsa y que si le quitan productos se investigue y se aplique el marco jurídico legal para dar al responsable la culpabilidad que la le establezca.

3. El CLAP “Ríos Reina” respecto a DDHH ¿podrá Identificar las debilidades en cuanto a la organización y funcionamiento del CLAP como organización de base del Poder Popular en el cumplimiento del abastecimiento de productos de primera necesidad como derecho humano fundamental? Respuesta: Cuando los procesos se hacen lentos es por falta de información efectiva y eficaz así como los procesos. Deben existir las auditorias constantes y al azar de las estructuras del Poder. Es decir, la contraloría de los movimientos sociales y no el control de todo por los movimientos sociales.

4. El CLAP “Ríos Reina” respecto a DDHH ¿Cómo influye el beneficio versus el hecho de ser frontera? Respuesta: Influye mucho por el contexto geográfico transversalizado por la realidad fronteriza y todo lo que ello implica en relación al conjunto de la dinámica social, económica, política y cultural que define la complejidad de las realidades que confluyen en la frontera colombo venezolana en el contexto histórico-político actual. La comercialización y la migración sin conciencia Nacionalista.


miércoles, 19 de febrero de 2020

La relación entre los movimientos sociales en general y los Derechos Humanos.


Universidad Bolivariana de Venezuela
Maestría en Derechos Humanos
Unidad Curricular Construcción Social de los Derechos Humanos.

Catedrático: Franklin Zambrano.
Maestrante: Cruz Yayes Meneses. C.I. V-14.503.115

1.    La relación entre los movimientos sociales en general y los Derechos Humanos.


1. a. Introducción:
Abordaremos la realización de este artículo a partir de lo que nos dice Álvarez & Yanes ( 2011), el cual nos ubica la relación entre los movimientos sociales de forma general y los derechos humanos; de una manera que nos  demanda una toma de conciencia de lo que podemos hacer a nivel individual, como profesionales  y ahora con los conocimientos y conciencia que estamos alcanzando en la realización de nuestros estudios de maestría en derechos humanos: “Reto que ha de ir ligado a un compromiso de acción que debe desarrollarse en cualquiera de las esferas sociales (movimientos, asociaciones, ONG’s, etc.) que tenemos a nuestro alcance.”.  Esto referido a la enseñanza y aprendizaje en el contexto universitario.
Tuvimos la experiencia como atleta de alto rendimiento de sufrir un accidente que nos dejó cuadripléjico,  durante una competencia clasificatoria para los Juegos Deportivos Juveniles de Cumaná 95 en San Fernando de Apure y aunque recibimos la atención urgente por parte de la Gobernación del Estado Carabobo para la primera intervención que nos permitió recuperar nuestras facultades de sensibilidad y motricidad de forma inmediata post operatoria, para la segunda intervención nos encontramos sin apoyo gubernamental en el Estado Táchira a pesar de ser estudiante de la Escuela Deportiva del Táchira y deportista representante del mismo. 
Una campaña de solicitud de limosna, titulada por mi padre “De la mendicidad del Deporte Tachirense”  permitió recoger algunos recursos que nos ayudaron a sufragar los gastos.  Si se hubiera creado y desarrollado una Fundación de Padres y Representantes de los Atletas Tachirenses, no solo en mi caso particular sino en otros muchos casos la protección del atleta habría significado la diferencia.
Tuvimos la experiencia de la creación de la Fundación de Terapia, Educación y Orientación Sexual (Funda TEOS)  en el año 1997, cuando participamos como miembro de la Junta Directiva de dicha Fundación para salvar una propuesta de creación del Programa Estratégico Regional de Educación Sexual a nivel Regional, Municipal e Institucional que el sexólogo Cruz Yayes Barco, había diseñado como una ponencia  al Congreso de Sexología en Barquisimeto y había recibido el respaldo del rector de la Universidad Nacional Experimental del Táchira, la Gobernación del Estado Táchira, el Obispo de San Cristóbal, el Ministerio de la Familia, la Dirección de Educación del Estado Táchira y una decena de instituciones públicas, privadas, medios de comunicación y parlamentario.  Creamos la Fundación y la propuesta se salvó hasta encontrar dentro de la UNET un espacio más favorable y se pudo diseñar las Jornada Regional de Salud y Armonía Sexual que le dieron sustentabilidad, sostenibilidad, desarrollo y permanencia a la Propuesta de creación del programa que fue concebido para prevenir el SIDA, los embarazos en adolescentes,  la violencia sexual contra niños, niñas, adolescentes y mujeres, el aborto y otros problemas de naturaleza sexual o relacionados con la sexualidad como la farmacodependencia.
Ahora en el ejercicio profesional como Defensor Público, he percibido la vulnerabilidad de los presuntos agresores  que son acusados, indiciados, juzgados, condenados o encarcelados dentro de una realidad totalmente contraria al “Estado Democrático, Social de Derecho y Justicia”  y que ignora, niega y viola en muchos casos los derechos humanos y constitucionales por carecer de recursos económicos para el pago de una adecuada y competente defensa, la evitación de juicio y condena por parte de los medios de comunicación social regionales de los indiciados o juzgados; y la salvaguarda de derechos humanos a niños, niñas, adolescentes, adultos y adultas mayores a los que tienen que enfrentar procesos judiciales que sufren de demoras, aplazamientos, acusaciones infundadas o violatorias de elementales procesos desde los inicios de la experticia policial, medicina forense, experticias de orden psicológico hasta las condenas por las presiones  judiciales y extrajudiciales de familiares,  opinión pública y otra naturaleza.
Surge la pregunta sobre por qué no hemos creado a la altura del Tercer Tramo de nuestra Maestría un Club, Movimiento, Grupo, Fundación, Ongs o Movimiento Social que nos visibilice en la ciudad de San Cristóbal y nos permita prestar alguna ayuda sustantiva a casos como el que vivimos en nuestra Familia Yayes Meneses con lo viciado, ilegal, violento, terrorífico del Caso del Seguro Social Dr. Patrocinio Peñuela y la situación que está viviendo una de nuestras compañeras, en los costos de atención a su condición de salud. Derechos Humanos que son violados frente a nosotros y nos quedamos en lecturas, informes, artículos, exposiciones y discusiones. 
En el desarrollo de su artículo Álvarez & Yanes (Ibidem) nos dice lo que nos permite revelar los factores civilizatorios, políticos, jurídicos, culturales, sociales e históricos que nos colocan a muchos y en particular a mí mismo,  en condiciones de impotencia para hacer real, concreto y efectivo lo que se refiere a los Derechos Humanos a nuestro mayor proximidad y alcance: “Sesenta años después de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, las diferencias y las paradojas entre los mundos se intensifica y desafortunadamente  tenemos que reconocer que no se cumplen muchos de los derechos básicos en el proceso de dignificación humana.”.  Pág. 154. Esto nos hace conscientes y nos mueve a la acción. Esperamos encontrar receptividad, sensibilidad, voluntad y compromiso para comenzar a crear un “movimiento social” a partir de la clase de maestrante y abierto a quienes se nos puedan adherir desde nuestros ambientes, familiares,  profesionales, laborales, políticos, sociales, culturales y religiosos.

        1.b. A partir de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Los autores anteriormente citados nos presentan a los Objetivos de Desarrollo del Milenio; el cual se propuso en la Asamblea General con la aprobación de 189  naciones allí representadas una escala de medición de lo “falso” que ha sido la Declaración de los Derechos Humanos en cuanto no tienen en el propio Organismo Mundial que los redactó, aprobó y proclama el poder ni los recursos, instrumentos para hacer que se cumplan; así nos dicen: “Estos compromisos constituyen una versión reducida y limitada de los acuerdos y compromisos que una y otra vez se vienen haciendo y que tan poca repercusión práctica tienen.”.
Presentar los Objetivos del Milenio nos permite acercarnos a la realidad y contrastarla con la Declaración de los Derechos Humanos, las Constituciones de las repúblicas que aparecen reunidas y aprobando esos objetivos entre ellos nuestra nación bolivariana y todas las Leyes Constitucionales, Orgánicas, Especiales y Ordinarias con Planes de Quinquenio, Programas y Servicios que de esos Derechos Humanos se derivan pero se quedan en el papel o destruido en los laberintos de la burocracia y la corrupción que aparece como una constante en la gran mayoría de los países del mundo.
Nos parece importante presentarlo en forma de columna para que se visibilicen mejor y ojalá nos podamos hacer un número de interrogantes sobre los cuales podríamos concienciarnos, motivarnos y emprender algunas acciones para que se creen en nuestra Universidad Bolivariana de acuerdo a las carreras y estudios de maestría que se imparten algunos movimientos sociales en relación a los Derechos Humanos que no son exclusividad de nuestra Maestría:
1. Erradicar la pobreza extrema y el hambre;
2. Lograr la enseñanza primaria universal;
3. Promover la igualdad entre los sexos y la autonomía de la mujer;
4. Reducir la mortalidad de los niños menores de 5 años;
5. Mejorar la salud materna;
6. Combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades;
7. Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente;
8. Fomentar una asociación mundial para el desarrollo.
Una especial clarificación sobre la naturaleza de los movimientos sociales en relación a los Derechos Humanos y su pertinencia y validez , no lo ofrece el siguiente  párrafo del Artículo de los autores que estudiamos y que nos ha servido de clarificación para percibir la necesidad perenne de que nazcan y se desarrollen diversos movimientos sociales a escala local, regional, nacional, internacional y mundial para ayudar a reducir la brecha que existe entre la formulación y declaración de los Derechos Humanos y lo que se cumple en la realidad:
“El propio concepto de “derecho” dado desde la Filosofía del Derecho, entiende que los derechos humanos son facultades que se les atribuyen a las personas y a los grupos sociales “expresión de sus necesidades en lo referente a la vida, la libertad, la igualdad, la participación política o social, o cualquier otro aspecto fundamental que afecte al desarrollo integral de las personas en una comunidad de hombres libres, exigiendo el respeto o la actuación de los demás hombres, de los grupos sociales y del Estado, y con garantía de los poderes públicos para restablecer su ejercicio en caso de violación o para realizar la prestación” (Villán, 2002). Pero como contrapartida, esta definición tan precisa de derecho no da idea de lo lejos que están aún las actuales sociedades del reconocimiento y la práctica de derechos básicos y fundamentales, o lo que es peor: del abuso y violaciones de los derechos humanos por parte de los Estados en nombre del bien común y de la paz mundial. Ibidem  Pág. 157


         1.c. Conclusiones: 
Del artículo de Nuñez (2000):  “Trabajo, Derechos Humanos y Movimientos Sociales” sobre una importante experiencia que nos la presenta el autor como “… la práctica interdiscursiva con la que se fue conformando desde una Organización No Gubernamental , un Programa de Promoción y Prevención en Salud Mental Comunitaria, trabajando sobre los efectos en la subjetividad de la Precarización Laboral y el Desempleo.”.
Consideramos que lo que hemos presentado en la Introducción lo podemos enlazar con este material con su carga de vivencias que se reflejan en los elementos concretos que llevan a la creación de la ONG y al Programa resultante de la demanda de respuesta por lo que se descubre: “ Asistimos a situaciones plenas de desesperación, tristeza, dolor interno, soledades, desbordes de angustia junto a otras expresiones en las que siempre están presentes las rupturas con los lazos sociales.” Ibidem ; que no se quedan en interpretaciones  de la inmediatez sino como productos o resultantes de “condiciones de vida emergentes en nuestras sociedades a partir de la implantación de las políticas neoliberales y los cambios operados en el mundo del trabajo, a partir de la precarización laboral, junto a la situación de desempleo y ambas , estrechamente ligadas a la condición de exclusión social.”. Ibidem.
No podemos quedarnos como lectores, comentaristas, articulistas, ensayistas y menos convertirnos en expertos, especialistas en Derechos Humanos en una relación cognitiva y espectadores; como si esa temática no demanda de cambios y transformaciones que están en nuestra propia realidad y que desde nuestras instituciones universitarias, gremiales, laborales, sociales podemos hacer algún tipo de incidencia.
Nuestra experiencia personal de necesitado, cuando muy joven de atención médica altamente especializada y costosa y con la Fundación TEOS en la que pudimos compartir todos los obstáculos y ataques a un programa valioso y pertinente para todo el pueblo del Táchira; como dentro de toda nuestra nación, continente y mundo ha encontrado en estas publicaciones estudiadas, analizadas y discutidas con mi padre Cruz Yayes Barco dentro del principio de Aprendizaje Colaborativo con el cual asumimos esta Maestría. La pregunta generadora de esta construcción fue: ¿Cómo abordar la relación de forma general de los movimientos sociales y los Derechos Humanos que nos sirva para tomar decisión sobre la creación de una ONG, Fundación sin fines de lucro, Movimientos Sociales en lo que nos queda de desarrollo de la Maestría? Varias conversaciones y lectura especialmente del Capítulo VII como capítulo final del libro Salud y Armonía Sexual de Yayes (2009) titulado “Fundación de Terapia, Educación y Orientación Sexual: Fundación Teos.”.
En la página 273 del libro Salud y Armonía Sexual aparecen en el Artículo 30 los que fuimos electos y designados para conformar la primera Junta Directiva para el período que terminará en enero del año 2.001. “CRUZ ALEJANDRO YAYES BARCO como PRESIDENTE; MARITZA ARVELO como VICE-PRESIDENTE; CRUZ ALEJANDRO YAYES MENESES como SECRETARIO GENERAL; MAYRA DE FUENTES como TESORERO y LUIS FUENTES como PRIMER VOCAL; NILVE MENESES DE YAYES como SEGUNDO VOCAL y DORA SÁNCHEZ como TERCER VOCAL.

Referencias Bibliográficas:

1)    Álvarez Domínguez, Pablo; Yanes Cabrera, Cristina
Derechos humanos y movimientos sociales: experiencia participativa en la universidad REXE. Revista de Estudios y Experiencias en Educación, vol. 10, núm. 19, enero-julio, 2011, pp. 153-175.Universidad Católica de la Santísima Concepción. Concepción, Chile.

2)    Nuñez, Carlos R.  Docente de la Facultad de Ciencias Políticas. Integrante del Área de Salud y Trabajo de la UNR. Coordinador Equipo Salud de ONG CEDIS. 2000.

3)    Yayes Barco, Cruz Alejandro. Salud y Armonía Sexual. Editorial Letralia. Cagua, Aragua, Venezuela. 2009.

La educación como derecho humano